domingo, 8 de julio de 2012

Caminante (Joan Manuel Serrat)


Todo pasa y todo queda
Pero lo nuestro es pasar,
Pasar haciendo caminos,
Caminos sobre la mar.
Nunca perseguí la gloria,
Ni dejar en la memoria
De los hombres mi canción;
Yo amo los mundos sutiles,
Ingrávidos y gentiles
Como pompas de jabón.
Me gusta verlos pintarse de sol y grana,
Volar bajo el cielo azul,
Temblar súbitamente y quebrarse...
Nunca perseguí la gloria.
Caminante son tus huellas el camino y nada más;
Caminante, no hay camino se hace camino al andar.
Al andar se hace camino
Y al volver la vista atrás
Se ve la senda que nunca
Se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino sino estelas en la mar...
Hace algún tiempo en ese lugar
Donde hoy los bosques se visten de espinos
Se oyó la voz de un poeta gritar
Caminante no hay camino, se hace camino al andar...
Golpe a golpe, verso a verso...
Murió el poeta lejos del hogar
Le cubre el polvo de un país vecino.
Al alejarse, le vieron llorar.
"caminante, no hay camino, se hace camino al andar..."
Golpe a golpe, verso a verso...
Cuando el jilguero no puede cantar
Cuando el poeta es un peregrino,
Cuando de nada nos sirve rezar.
Caminante no hay camino, se hace camino al andar.
Golpe a golpe, verso a verso. (3 bises)
Una cancion que es para que sepamos que nada esta dicho en esta vida y que los momentos buenos o malos no se podran volver a vivir, que nuestra vida no tiene destinos marcados que nosotros los hacemos y alfinal de la vida veremos el sendero llevado "caminante no ahi camino se hace camino al andar"
"nosotros somos los que tenemos entre nuestros dos oidos nuestras ideas nos hacen esclavos o libres"

El rey y sus flores (F.Jd)


Era un rey aquel
Que cinco flores tenían
Y a todas las quería
Con todo su ser
La reina muy celosa
Al rey un día le dijo
Que para cumplir su capricho
Eligiera a la más hermosa
El rey con cierta duda
Pregunto a que se debía
Aquella capricheria
Que la reina tuvo ese día
La reina entristecida
Le dijo que viajaba
Y que con ella se llevaba
A la flor escogida
El rey con asombro
Le dijo que eso no podría ser
Pues las cinco han de tener
Un brillo precioso
Pero la rosa más hermosa
La reina siempre tenia
Pues el rey sabía
Que para él  la reina era la única hermosa

lunes, 7 de mayo de 2012

Vientre de Cuna .-Ricardo Arjona


Me gusta verte hablar de la cocina
Con la seriedad que Gorvachov aborda el tema
De la caida de su cortina
Me gusta verte remendar mi pantalon
Que hubiese ido a parar a la basura
Si hubiese sido otra la situacion
Me gusta verte sonreir cuando lo normal era llorar
Me has gustado siempre y hoy me gustas mucho mas
Porque sin aludir a la fortuna
Aquella noche de luna tu vientre se hizo cuna
Trayendo el fruto de algo mutuo
Y es que es tan sagrada tu labor
Que pariendo con dolor materializas el amor
Volviendo humano el sentimiento
Me gusta verte en el supermercado
Escoger los abarrotes
Segun la economia nos haya tratado
Me gusta ver tu abdomen de perfil
Que viene a recordarme
Que de una nueva vida sere yo el albañil
Me gusta verte ese swing que has adoptado al caminar

Y es que me gustas toda,incluso verte estornudar
Por que sin aludir a la fortuna
Aquella noche de luna tu vientre se hizo cuna
Trayendo el fruto de algo mutuo
Y es que es tan sagrada tu labor
Que pariendo con dolor materializas el amor
Volviendo humano el sentimiento
Me gusta verte en el supermercado y tu swing al caminar
Y tantas otras cosas, pero mas me gustaras
Cuando alguien te llame : mama

lunes, 23 de abril de 2012

Aborto

 Con un bebe de brazos, una mujer muy asustada

llega al consultorio de su ginecólogo y le dice: Doctor: por favor 

ayúdeme, tengo un problema muy serio. Mi bebé aún no cumple un año y ya 

estoy de nuevo embarazada. No quiero tener hijos en tan po ...co 

tiempo, prefiero un espacio mayor entre uno y otro..... El médico le 

preguntó: Muy bien, ¿qué quiere que yo haga? Ella respondió: Deseo 

interrumpir mi embarazo y quiero contar con su ayuda. El médico se quedó

pensando un poco y después de algún tiempo le dice: Creo que tengo un 

método mejor para solucionar el problema y es menos peligroso para 

usted. La mujer sonrió, pensando que el médico aceptaría ayudarla. Él 

siguió hablando: Vea señora, para no tener que estar con dos bebés a la 

vez en tan corto espacio de tiempo, vamos a matar a este niño que está 

en sus brazos. Así usted tendrá un periodo de descanso hasta que el otro

niño nazca. Si vamos a matar, no hay diferencia entre uno y otro de los

niños. Y hasta es más fácil sacrificar éste que usted tiene entre sus 

brazos puesto que usted no correrá ningún riesgo. La mujer se asustó y 

dijo: ¡No, doctor! ¡Que horror! ¡Matar a un niño es un crimen! También 

pienso lo mismo, señora, pero usted me pareció tan convencida de 

hacerlo, que por un momento pensé en ayudarla. El médico sonrió y 

después de algunas consideraciones, vio que su lección surtía efecto. 

Convenció a la madre que no hay la menor diferencia entre matar un niño 

que ya nació y matar a uno que está por nacer, y que está vivo en el 

seno materno. ¡ EL CRIMEN ES EXACTAMENTE EL MISMO !

lunes, 9 de abril de 2012

La cancion del pirata (Jose de Espronceda)


Con diez cañones por banda,
viento en popa, a toda vela,
no corta el mar, sino vuela
un velero bergantín.
Bajel pirata que llaman,
por su bravura, El Temido,
en todo mar conocido
del uno al otro confín.
La luna en el mar riela
en la lona gime el viento,
y alza en blando movimiento
olas de plata y azul;
y va el capitán pirata,
cantando alegre en la popa,
Asia a un lado, al otro Europa,
y allá a su frente Estambul:
Navega, velero mío
sin temor,
que ni enemigo navío
ni tormenta, ni bonanza
tu rumbo a torcer alcanza,
ni a sujetar tu valor.
Veinte presas
hemos hecho
a despecho
del inglés
y han rendido
sus pendones
cien naciones
a mis pies.
Que es mi barco mi tesoro,
que es mi dios la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria, la mar.
Allá, muevan feroz guerra
ciegos reyes
por un palmo más de tierra;
que yo aquí, tengo por mío
cuanto abarca el mar bravío,
a quien nadie impuso leyes.
Y no hay playa,
sea cualquiera,
ni bandera
de esplendor,
que no sienta
mi derecho
y dé pechos mi valor.
Que es mi barco mi tesoro,
que es mi dios la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria, la mar.
A la voz de "¡barco viene!"
es de ver
cómo vira y se previene
a todo trapo a escapar;
que yo soy el rey del mar,
y mi furia es de temer.
En las presas
yo divido
lo cogido
por igual;
sólo quiero
por riqueza
la belleza
sin rival.
Que es mi barco mi tesoro,
que es mi dios la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria, la mar.
¡Sentenciado estoy a muerte!
Yo me río
no me abandone la suerte,
y al mismo que me condena,
colgaré de alguna antena,
quizá, en su propio navío
Y si caigo,
¿qué es la vida?
Por perdida
ya la di,
cuando el yugo
del esclavo,
como un bravo,
sacudí.
Que es mi barco mi tesoro,
que es mi dios la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria, la mar.
Son mi música mejor
aquilones,
el estrépito y temblor
de los cables sacudidos,
del negro mar los bramidos
y el rugir de mis cañones.
Y del trueno
al son violento,
y del viento
al rebramar,
yo me duermo
sosegado,
arrullado
por el mar.
Que es mi barco mi tesoro,
que es mi dios la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria, la mar

martes, 3 de abril de 2012

Cancion de otoño en primavera.-Rubén Darío


Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer.

Plural ha sido la celeste
historia de mi corazón.
Era una dulce niña, en este
mundo de duelo y aflicción.

Miraba como el alba pura;
sonreía como una flor.
Era su cabellera obscura
hecha de noche y de dolor.

Yo era tímido como un niño.
Ella, naturalmente, fue,
para mi amor hecho de armiño,
Herodías y Salomé...

Juventud, divino tesoro
¡ya te vas para no volver...!
Cuando quiero llorar, no lloro,
y a veces lloro sin querer...

La otra fue más sensitiva,
y más consoladora y más
halagadora y expresiva,
cual no pensé encontrar jamás.

Pues a su continua ternura
una pasión violenta unía.
En un peplo de gasa pura
una bacante se envolvía...

En sus brazos tomó mi ensueño
y lo arrulló como a un bebé...
Y le mató, triste y pequeño
falto de luz, falto de fe...

Juventud, divino tesoro,
¡te fuiste para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro,
y a veces lloro sin querer...

Otra juzgó que era mi boca
el estuche de su pasión
y que me roería, loca,
con sus dientes el corazón

poniendo en un amor de exceso
la mira de su voluntad,
mientras eran abrazo y beso
síntesis de la eternidad:

y de nuestra carne ligera
imaginar siempre un Edén,
sin pensar que la Primavera
y la carne acaban también...

Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!...
Cuando quiero llorar, no lloro,
¡y a veces lloro sin querer!

¡Y las demás!, en tantos climas,
en tantas tierras, siempre son,
si no pretexto de mis rimas,
fantasmas de mi corazón.

En vano busqué a la princesa
que estaba triste de esperar.
La vida es dura. Amarga y pesa.
¡Ya no hay princesa que cantar!

Mas a pesar del tiempo terco,
mi sed de amor no tiene fin;
con el cabello gris me acerco
a los rosales del jardín...

Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!...
Cuando quiero llorar, no lloro,
y a veces lloro sin querer...
¡Mas es mía el Alba de oro!

domingo, 25 de marzo de 2012

Si muero antes que tu




si muero antes que tu un hermoso vídeo con palabras justas

una hermosa reflexión de Mariano Osorio

¿que les pareció el vídeo ?

De una madre a su hija


Hermoso vídeo con bellas palabras espero les guste

miércoles, 21 de marzo de 2012

Tratar de estar mejor (Diego Torres)


Cuenta esa vieja historia
que, a pesar de todo, algunas cosas quedan
los momentos vividos,
recuerdos que van a quedar
en lo profundo del alma.
Nada puede hacerte olvidar
que anduvimos el mismo camino,
y las cosas que hicimos
fue porque quisimos estar
de nuevo en este lugar.
A pesar de los errores,
a pesar de los defectos y virtudes,
guardo en mí los mejores
momentos que van a quedar
en lo profundo del alma
Dejá todo y no lo pienses más;
no se puede olvidar lo vivido.
Y tus seres queridos
te extrañan cuando ya no estás;
no quieren llorarte.
Tantas veces tuvimos que estar separados
y sentir que a pesar de la distancia
sentimos lo mismo en cualquier momento.
Nada puede hacerte olvidar
que anduvimos el mismo camino,
y las cosas que hicimos
fue porque quisimos estar
de nuevo en este lugar.
Sun and sky, give all a'we
Good vibes black and white aint no lie
Live up, live up and make yourself
Yourself feed good
Like I know, like I know
You should.
No te compliques más,
siempre hay una razón.
Tratar de revivir,
tratar de estar mejor.
We all are one and we
No have to fight
Wave up you
Hands and make we all unite
Touch me, touch me and show me love
Legad one called Diego
Bringnig positive vibes
Yes man.
Tratar de revivir,
tratar de estar mejor.

lunes, 19 de marzo de 2012

Color esperanza Diego Torres

Sé que hay en tus ojos con solo mirar 
que estas cansado de andar y de andar 
y caminar girando siempre en un lugar 

Sé que las ventanas se pueden abrir 
cambiar el aire depende de ti 
te ayudara vale la pena una vez más 

Saber que se puede querer que se pueda 
quitarse los miedos sacarlos afuera 
pintarse la cara color esperanza 
tentar al futuro con el corazón 

Es mejor perderse que nunca embarcar 
mejor tentarse a dejar de intentar 
aunque ya ves que no es tan fácil empezar 

Sé que lo imposible se puede lograr 
que la tristeza algún día se irá 
y así será la vida cambia y cambiará 

Sentirás que el alma vuela 
por cantar una vez más 

Vale más poder brillar 
Que solo buscar ver el sol  







Chami siempre contaras contigo este post es para ti *-* Deja que tus sueños sean olas que se van
libres como el viento en mitad del mar
creo que la vida es un tesoro sin igual

Un mundo Ideal



Un Mundo Ideal 

Yo te quiero enseñar un fantástico mundo. 
Ven princesa y deja a tu corazón soñar. 
Yo te puedo mostrar cosas maravillosas. 
Ven princesa y déjate llevar a un mundo ideal. 

Un mundo ideal. 
Un mundo en el que tu y yo 
podamos decidir como vivir 
sin nadie que lo impida. 
Un mundo ideal que nunca pude imaginar. 
Donde ya comprendí que junto a ti el mundo es un lugar para soñar. 

Fabulosa visión, sentimiento divino. 
Voy volando contigo hacia un nuevo amanecer. 

Un mundo ideal. 
Mira bien lo que hay. 
Allí mil cosas voy a ver. 
Conteniendo el aliento. 
Soy como un haz de luz que lejos va. 
Y nunca ya podrá volver atrás. 

Un mundo ideal. 
Un horizonte a descubrir. 
Un mundo para ti. 
Para los dos. 
Déjate llevar a un mundo ideal. 

Un mundo ideal. 
Un mundo en el que tu y yo. 
Podamos decidir como vivir sin nadie que lo impida. 
Un mundo ideal. 
Cada vuelta es sorpresa. 
Un horizonte a descubrir. 
Cada instante es un sueño. 

Un mundo para ti. 
Para los dos. 
Llévame. 
A dónde sueñes tú. 
Un mundo ideal. 
Que compartir. 
Que alcanzar. 
Que contemplar. 
Tú junto a mí. 

jueves, 8 de marzo de 2012

Feliz día de la mujer

Feliz dia de la mujer a todas las mujeres que me leen que lo hayan pasado bien y gracias a los que nos han saludado

No se quien las invento
No se quien nos hizo ese favor tuvo que ser Dios
Que vio al hombre tan solo y sin dudar lo penso en dos
En dos

Dicen que fue una costilla
Hubiese dado mi columna vertebral por verlas andar
Despues de hacer el amor hasta el tocador y sin voltear
Sin voltear, sin voltear

Y si habitaran la luna
Habria mas astronautas que arenas en el mar
Mas viajes al espacio que historias en un bar
En un bar, por que negar
Que es lo mejor que se puso en este lugar

Mujeres, lo que nos pidan podemos
Si no podemos no existe
Y si no existe lo inventamos por ustedes
Mujeres, lo que nos pidan podemos
Si no podemos no existe
Y si no existe lo inventamos por ustedes

Mujeres
Que hubiera escrito Neruda
Que habria pintado Picasso
Si no existieran musas
Como ustedes

Nosotros con el machismo, ustedes al feminismo
Y al final la historia termina en par
Porque en pareja vinimos y en pareja hay que terminar
Terminar, terminar

Y si habitaran la luna
Habria mas astronautas que arenas en el mar
Mas viajes al espacio que historias en un bar
En un bar, por que negar
Que es lo mejor que se puso en este lugar

Mujeres, lo que nos pidan podemos
Si no podemos no existe
Y si no existe lo inventamos por ustedes
Mujeres, lo que nos pidan podemos
Si no podemos no existe
Y si no existe lo inventamos por ustedes

Mujeres
Que hubiera escrito Neruda
Que habria pintado Picasso
Si no existieran musas
Como ustedes

Mujeres, lo que nos pidan podemos
Si no podemos no existe
Y si no existe lo inventamos por ustedes

Mujeres
Que hubiera escrito Neruda
Que habria pintado Picasso
Si no existieran musas
Como ustedes


Muchas gracias a todos los que me leen ^^

F.J.

jueves, 26 de enero de 2012

Tiempo vivido

Esta es la historia de un hombre al que yo definiría como buscador...
Un buscador es alguien que busca, no necesariamente es alguien que encuentra.
Tampoco esa alguien que, necesariamente, sabe lo qué es lo que está buscando, es simplemente para quien su vida es una búsqueda.
Un día, el buscador sintió que debía ir hacia la ciudad de Kammir. El había aprendido a hacer caso riguroso a estas sensaciones que venían de un lugar desconocido de sí mismo, así que dejó todo y partió.
Después de dos días de marcha por los polvorientos caminos divisó, a lo lejos, Kammir. Un poco antes de llegar al pueblo, una colina a la derecha del sendero le llamó mucho la atención. Estaba tapizada de un verde maravilloso y había un montón de árboles, pájaros y flores encantadores; la rodeaba por completo una especie de valla pequeña de madera lustrada.
...Una portezuela de bronce lo invitaba a entrar.
De pronto, sintió que olvidaba el pueblo y sucumbió ante la tentación de descansar por un momento en ese lugar.
El buscador traspaso el portal y empezó a caminar lentamente entre las piedras blancas que estaban distribuidas como al azar, entre los árboles.
Dejó que sus ojos se posaran como mariposas en cada detalle de este paraíso multicolor.
Sus ojos eran los de un buscador, y quizás por eso descubrió, sobre una de las piedras, aquella inscripción…:


Abedul Tareg, vivió 8 años, 6 meses, 2 semanas y 3 días


Se sobrecogió un poco al darse cuenta de que esa piedra no era simplemente una piedra, era una lápida.
Sintió pena al pensar que un niño de tan corta edad estaba enterrado en ese lugar.
Mirando a su alrededor, el hombre se dio cuenta de que la piedra de al lado también tenía una inscripción. Se acercó a leerla, decía:


Yamir Kalib, vivió 5 años, 8 meses, y 3 semanas


El buscador se sintió terriblemente conmocionado.
Este hermoso lugar era un cementerio y cada piedra, una tumba.
Una por una, empezó a leer las lápidas.
Todas tenían inscripciones similares: un nombre y el tiempo de vida exacto del muerto.
Pero lo que lo conectó con el espanto, fue comprobar que el que más tiempo había vivido apenas sobrepasaba 11 años...
Embargado por un dolor terrible se sentó y se puso a llorar.


El cuidador del cementerio, pasaba por ahí y se acercó.
Lo miró llorar por un rato en silencio y luego le preguntó si lloraba por algún familiar.


- No, ningún familiar - dijo el buscador - ¿qué pasa con este pueblo?, ¿qué cosa tan terrible hay en esta ciudad?. ¿Por qué tantos niños muertos enterrados en este lugar?, ¿cuál es la horrible maldición que pesa sobre esta gente, que lo ha obligado a construir un cementerio de chicos?!!!
El anciano sonrió y dijo:


- Puede Ud. serenarse. No hay tal maldición. Lo que pasa es que aquí tenemos una vieja costumbre. Le contaré...
Cuando un joven cumple quince años sus padres le regalan una libreta, como ésta que tengo aquí, colgando del cuello.
Y es tradición entre nosotros que a partir de allí, cada vez que uno disfruta intensamente de algo, abre la libreta y anota en ella:


a la izquierda, qué fue lo disfrutado…
a la derecha, cuánto tiempo duró el gozo.


Conoció a su novia, y se enamoró de ella. ¿Cuánto tiempo duró esa pasión enorme y el placer de conocerla?, ¿una semana?, ¿dos?, ¿tres semanas y media?…
Y después… la emoción del primer beso, el placer maravilloso del primer beso, ¿cuánto duró?, ¿el minuto y medio del beso?, ¿dos días?, ¿una semana?…
¿Y el embarazo o el nacimiento del primer hijo...?
¿y el casamiento de los amigos…?
¿y el viaje más deseado…?
¿y el encuentro con el hermano que vuelve de un país lejano…?
¿Cuánto tiempo duró el disfrutar de estas situaciones?…
¿horas?, ¿días?…


Así... vamos anotando en la libreta cada momento que disfrutamos... cada momento.


Cuando alguien se muere,
es nuestra costumbre,
abrir su libreta
y sumar el tiempo de lo disfrutado,
para escribirlo sobre su tumba,
porque Ese es, para nosotros,
el único y verdadero tiempo VIVIDO.

El eco


Un niño y su padre están caminando en las montañas, de repente, el hijo se cae, se lastima y grita, "Ay!"

Para su sorpresa oye una voz repitiendo en algún lugar de la montaña "Ay!".

Con curiosidad el niño grita "¿quién está ahí?" recibe como respuesta "¿quién está ahí?".

Enojado por la respuesta el niño grita "Cobarde!" y recibe como respuesta "Cobarde!".

El niño mira a su padre y le pregunta, "que sucede?".

El padre sonriendo le dice:

"Hijo mío, presta atención", y grita a la montaña "te admiro!" y la voz le responde "te admiro!", de nuevo el hombre grita "eres un campeón" y la voz le responde "eres un campeón".

El niño esta asombrado pero no entiende, el padre le explica:

"La gente lo llama eco, pero en realidad es la vida, te devuelve todo lo que dices y haces. Nuestra vida es solamente un reflejo de nuestras acciones; si deseas más amor en el mundo, crea más amor a tu alrededor; si deseas felicidad, da felicidad a los que te rodean; si quieres una sonrisa en el alma, da una sonrisa al alma de los que conoces.

Esta relación se aplica a todos los aspectos de la vida, la vida te dará de regreso exactamente aquello que tu le has dado. Tu vida no es una coincidencia, es un reflejo de ti.

Alguien dijo: Si no te gusta lo que recibes de vuelta, revisa muy bien lo que estas dando."

El ángel - Cuento de Hans Christian Andersen


Cada vez que muere un niño bueno, baja del cielo un ángel de Dios Nuestro Señor, toma en brazos el cuerpecito muerto y, extendiendo sus grandes alas blancas, emprende el vuelo por encima de todos los lugares que el pequeñuelo amó, recogiendo a la vez un ramo de flores para ofrecerlas a Dios, con objeto de que luzcan allá arriba más hermosas aún que en el suelo. Nuestro Señor se aprieta contra el corazón todas aquellas flores, pero a la que más le gusta le da un beso, con lo cual ella adquiere voz y puede ya cantar en el coro de los bienaventurados.

He aquí lo que contaba un ángel de Dios Nuestro Señor mientras se llevaba al cielo a un niño muerto; y el niño lo escuchaba como en sueños. Volaron por encima de los diferentes lugares donde el pequeño había jugado, y pasaron por jardines de flores espléndidas.

-¿Cuál nos llevaremos para plantarla en el cielo? -preguntó el ángel.

Crecía allí un magnífico y esbelto rosal, pero una mano perversa había tronchado el tronco, por lo que todas las ramas, cuajadas de grandes capullos semiabiertos, colgaban secas en todas direcciones.

-¡Pobre rosal! -exclamó el niño-. Llévatelo; junto a Dios florecerá.

Y el ángel lo cogió, dando un beso al niño por sus palabras; y el pequeñuelo entreabrió los ojos.

Recogieron luego muchas flores magníficas, pero también humildes ranúnculos y violetas silvestres.

-Ya tenemos un buen ramillete -dijo el niño; y el ángel asintió con la cabeza, pero no emprendió enseguida el vuelo hacia Dios. Era de noche, y reinaba un silencio absoluto; ambos se quedaron en la gran ciudad, flotando en el aire por uno de sus angostos callejones, donde yacían montones de paja y cenizas; había habido mudanza: se veían cascos de loza, pedazos de yeso, trapos y viejos sombreros, todo ello de aspecto muy poco atractivo.

Entre todos aquellos desperdicios, el ángel señaló los trozos de un tiesto roto; de éste se había desprendido un terrón, con las raíces, de una gran flor silvestre ya seca, que por eso alguien había arrojado a la calleja.

-Vamos a llevárnosla -dijo el ángel-. Mientras volamos te contaré por qué.

Remontaron el vuelo, y el ángel dio principio a su relato:

-En aquel angosto callejón, en una baja bodega, vivía un pobre niño enfermo. Desde el día de su nacimiento estuvo en la mayor miseria; todo lo que pudo hacer en su vida fue cruzar su diminuto cuartucho sostenido en dos muletas; su felicidad no pasó de aquí. Algunos días de verano, unos rayos de sol entraban hasta la bodega, nada más que media horita, y entonces el pequeño se calentaba al sol y miraba cómo se transparentaba la sangre en sus flacos dedos, que mantenía levantados delante el rostro, diciendo: «Sí, hoy he podido salir». Sabía del bosque y de sus bellísimos verdores primaverales, sólo porque el hijo del vecino le traía la primera rama de haya. Se la ponía sobre la cabeza y soñaba que se encontraba debajo del árbol, en cuya copa brillaba el sol y cantaban los pájaros.

Un día de primavera, su vecinito le trajo también flores del campo, y, entre ellas venía casualmente una con la raíz; por eso la plantaron en una maceta, que colocaron junto a la cama, al lado de la ventana. Había plantado aquella flor una mano afortunada, pues, creció, sacó nuevas ramas y floreció cada año; para el muchacho enfermo fue el jardín más espléndido, su pequeño tesoro aquí en la Tierra. La regaba y cuidaba, preocupándose de que recibiese hasta el último de los rayos de sol que penetraban por la ventanuca; la propia flor formaba parte de sus sueños, pues para él florecía, para él esparcía su aroma y alegraba la vista; a ella se volvió en el momento de la muerte, cuando el Señor lo llamó a su seno. Lleva ya un año junto a Dios, y durante todo el año la plantita ha seguido en la ventana, olvidada y seca; por eso, cuando la mudanza, la arrojaron a la basura de la calle. Y ésta es la flor, la pobre florecilla marchita que hemos puesto en nuestro ramillete, pues ha proporcionado más alegría que la más bella del jardín de una reina.

-Pero, ¿cómo sabes todo esto? -preguntó el niño que el ángel llevaba al cielo.

-Lo sé -respondió el ángel-, porque yo fui aquel pobre niño enfermo que se sostenía sobre muletas. ¡Y bien conozco mi flor!

El pequeño abrió de par en par los ojos y clavó la mirada en el rostro esplendoroso del ángel; y en el mismo momento se encontraron en el Cielo de Nuestro Señor, donde reina la alegría y la bienaventuranza. Dios apretó al niño muerto contra su corazón, y al instante le salieron a éste alas como a los demás ángeles, y con ellos se echó a volar, cogido de las manos. Nuestro Señor apretó también contra su pecho todas las flores, pero a la marchita silvestre la besó, infundiéndole voz, y ella rompió a cantar con el coro de angelitos que rodean al Altísimo, algunos muy de cerca otros formando círculos en torno a los primeros, círculos que se extienden hasta el infinito, pero todos rebosantes de felicidad. Y todos cantaban, grandes y chicos, junto con el buen chiquillo bienaventurado y la pobre flor silvestre que había estado abandonada, entre la basura de la calleja estrecha y oscura, el día de la mudanza.

FIN

miércoles, 25 de enero de 2012

Mujercita


mujercita de mi vida
angel de mi alma
niña crecida
mujer aniñada

hace ya un tiempo
que no eres una niña
ni tampoco eres mujer
mas bien eres una mujercita
aprendiendo a querer

Mujercita ¡que linda eres!
eres un sueño echo mujer
un angel caido del cielo
una semilla que ah de florecer

mujercita ven conmigo
yo te enseñare a amar
solo dame tu cariño
y no me dejes jamas

miércoles, 18 de enero de 2012

los tres sabios y el elefante


Había una vez tres sabios. Y eran muy sabios. Aunque los tres eran ciegos. Como no podían ver, se habían acostumbrado a conocer las cosas con solo tocarlas. Usaban sus manos para darse cuenta del tamaño, de la calidad y de la calidez de cuanto se ponía a su alcance.

Sucedió que un circo llegó al pueblo donde vivían los tres sabios que eran ciegos.
Entre las cosas maravillosas que llegaron con el circo, venía un gran elefante blanco. Y era tan extraordinario este animal que toda la gente no hacía más que hablar de él.

Los tres sabios que eran ciegos quisieron también ellos conocer al elefante. Se hicieron conducir hasta el lugar donde estaba y pidieron permiso para poder tocarlo.
Como el animal era muy manso, no hubo ningún inconveniente para que lo hicieran.
El primero de los tres estiró sus manos y tocó a la bestia en la cabeza. Sintió bajo sus dedos las enormes orejas y luego los dos tremendos colmillos de marfil que sobresalían de la pequeña boca. Quedó tan admirado de lo que había conocido que inmediatamente fue a contarles a los otros dos lo que había aprendido. Les dijo:

- El elefante es como un tronco, cubierto a ambos lados por dos frazadas, y del cual salen dos grandes lanzas frías y duras.

Pero resulta que cuando le tocó el turno al segundo sabio, sus manos tocaron al animal en la panza. Trataron de rodear su cuerpo, pero éste era tan alto que no alcanzaba a abarcarlo con los dos brazos abiertos.Luego de mucho palpar, decidió también él contar lo que había aprendido. Les dijo:

- El elefante se parece a un tambor colocado sobre cuatro gruesas patas, y está forrado de cuero con pelo para afuera.

Entonces fue el tercer sabio, y agarró el animal justo por la cola, se colgó de ella y comenzó a hamacarse como hacen los chicos con una soga. Como esto le gustaba a la bestia, estuvo largo rato divirtiéndose en medio de la risa de todos. Cuando dejó el juego, comentaba lo que sabía. También él dijo:

- Yo se muy bien lo que es un elefante. Es una cuerda fuerte y gruesa, que tiene un pincel en la punta. Sirve para hamacarse.

Resulta que cuando volvieron a casa y comenzaron a charlar entre ellos lo que habían descubierto sobre el elefante no se podían poner de acuerdo. Cada uno estaba plenamente seguro de lo que conocía. Y además tenía la certeza de que sólo había un elefante y de que los tres estaban hablando de lo mismo.

Pero lo que decían parecía imposible de concordar.

Tanto charlaron y discutieron que casi se pelearon. Pero al fin de cuentas, como eran los tres muy sabios, decidieron hacerse ayudar, y fueron a preguntar a otro sabio que había tenido la oportunidad de ver al elefante con sus propios ojos.

Y entonces descubrieron que cada uno de ellos tenía razón.

Una parte de la razón. Pero que conocían del elefante solamente la parte que habían tocado.

Y le creyeron al que lo había visto y les hablaba del elefante entero.

En todos los juicios que yo hago sobre ti, hay un juicio sobre mí mismo...

Y ambos son igualmente ciertos o falsos.

Mientras piense que yo estoy en posesión de la verdad y tú no lo estás, crearé separación, desigualdad y estableceré las bases para que el sufrimiento se instale en mi vida.

Lo mismo ocurre si pienso que tú posees la verdad y yo no.

La realidad es que ambos poseemos una parte de la verdad y una parte de ilusión.

Los dos miramos al mismo elefante, pero tú ves la cola y yo veo el tronco.

Cuando se mira por separado, la cola y el tronco parecen que no tienen nada en común. Sólo cuando se ve la totalidad del elefante es cuando la cola y el tronco unidos, cobran sentido.

No importa cuanto me esfuerce, me es imposible ver el significado de tu parte. La cola no comprende ni el porqué, ni la razón del tronco.

La única forma en la que admitiré tu experiencia es aceptarla como cierta, de la misma manera que acepto la mía como tal.

Debo dar la misma credibilidad a tus percepciones que a las mías. Hasta que no establezcamos esta igualdad, la semilla del conflicto permanecerá entre nosotros. No es necesario que diga que tú tienes razón y que yo estoy equivocado.

No necesito reemplazar mi verdad por la tuya, o vivir mi vida según tus premisas.
Ni tampoco es preciso que diga que tú estás equivocado y que insista en que debes vivir tu vida según mis condiciones. Estas exigencias provienen de la inseguridad y de la falsa creencia de que, para amarnos los unos a los otros, debemos estar de acuerdo.

No es cierto.
Para amarte debo aceptarte tal y como eres.
Es lo único que debo hacer.
¡Pero eso es mucho!

Aceptarte a ti tal y como eres, es una proposición tan profunda, como aceptarme a mí mismo tal y como soy. Es una tarea formidable, dada mi poca experiencia en este campo. Permitir que tengas tu experiencia es el principio. Aprendo a respetar lo que piensas y sientes incluso cuando no me gusta o no estoy de acuerdo con ello. Incluso aunque me disguste. En lugar de hacerte responsable del dolor que siento en relación a ti, aprendo a enfrentarme a mi propio dolor.

Mi reacción a tu experiencia -positiva o negativa- me proporciona información sobre mí mismo. El compromiso conmigo mismo y contigo es trabajar con mi propio dolor, no responsabilizarte a ti de él. Sólo cuando te devuelva el don de tu propia experiencia, sin imponerte mis propios pensamientos y sentimientos sobre ella, te amaré sin condiciones. Cuando acepte tu experiencia tal cual es, sin sentir la necesidad de cambiarla, te respetaré y te trataré como a un ser espiritual.
Mis pensamientos y sentimientos tienen importancia en sí mismos, pero no como comentarios o acusaciones a tu experiencia.

Al comunicar lo que pienso o siento sin hacerte responsable de mis pensamientos y sentimientos, acepto mi propia experiencia y permito que tú tengas la tuya.
En las relaciones, al igual que en la conciencia, las dos caras de la moneda deben ser aceptadas como iguales.

Una persona no superará el conflicto hasta que la experiencia de ambas haya sido respetada. La cuestión no es nunca el acuerdo, aunque lo parezca. La cuestión es: ¿Somos capaces de respetar nuestra experiencia mutuamente?

Cuando sentimos que la otra persona nos acepta tal y como somos, tenemos la motivación para adaptarnos el uno al otro. Adaptarse es hacerle al otro un lugar junto a nosotros; es no imponerse ni que se nos impongan. Una vez que se llega a la adaptación, ambas partes moran juntas. El hombre y la mujer, el blanco con el negro, el rico con el pobre.

Aceptar nuestras diferencias es honrar la humanidad que tenemos en común, es bendecir mutua y profundamente la experiencia que compartimos. De modo que la cola y el tronco discutirán hasta ponerse morados y ninguno de los dos ganará la discusión.
Ambas experiencias son igualmente válidas.

Al permitir que esto sea posible, el elefante empieza a cobrar forma.
Al aceptar la validez de tu experiencia sin intentar cambiarla, sin intentar que sea algo más parecida a la mía, mi propia experiencia empezará a adquirir un mayor significado.

Cuando te contemplo como a un igual y no como a alguien que precisa ser educado, reformado o determinado, el significado de nuestra relación se revela por sí mismo.
Cuando se le da la bienvenida a cada parte, el todo empieza a tomar forma y resulta más fácil comprender y apreciar el significado de las partes. Un mundo que pretende conseguir un acuerdo, encontrará conflicto y sectarismo. Un mundo que proporciona un espacio seguro a la diversidad, encontrará la unidad esencial para convertirse en entero. Frente a los opuestos tenemos dos opciones: resistirlos o abrazarlos.

Si los resistimos, provocaremos un conflicto entre el yo y el otro. Si los aceptamos, los integraremos como agentes dinámicos y originaremos una transformación alquímica en el interior del yo.

Del libro El Despertar Raúl Ferrini "Oración de Gestalt"

Yo soy Yo, Tú eres Tú, Yo hago lo mío, Tu haces lo tuyo. Yo no vine a este mundo a cumplir tus expectativas. Tú no viniste a este mundo a cumplir mis expectativas.
Sí coincidimos, ¡qué hermoso!Pero si no, no hay nada que hacer. Porque Yo soy Yo y Tú eres Tú.

lunes, 16 de enero de 2012

EL CONSEJO MATERNAL Olegario Víctor Andrade





Ven para acá, me dijo dulcemente
mi madre cierto día.
(Aún parece que escucho en el ambiente
de su voz la dulce melodía)
- Ven y dime qué causas tan extrañas
te arrancan esa lágrima, hijo mío,
que cuelga de tus trémulas pestañas
como gota cuajada de rocío.
Tú tienes una pena y me la ocultas;
¿no sabes que la madre más sencilla
sabe leer en el alma de sus hijos
como tú en la cartilla?
¿Quieres que te adivine lo que sientes?
ven acá pilluelo,
que con un par de besos en la frente
disiparé las nubes de tu cielo.
Yo prorrumpí a llorar. Nada le dije.
- La causa de mis lagrimas ignoro,
¡pero de vez en cuando se me oprime
el corazón y lloro!...
Ella inclinó la frente pensativa,
se turbó su pupila,
y enjugando sus ojos y los míos,
me dijo más tranquila:
- Llama siempre a tu madre cuando sufras,
que vendrá muerta o viva;
si está en el mundo, a compartir tus penas;
y si no, a consolarte desde arriba.
Y lo hago así cuando la suerte ruda,
como hoy, perturba de mi hogar la calma,
invoco el nombre de mi madre amada,
¡y entonces siento que se me ensancha el alma!

desde lejos


Existe mucha desconfianza en las relaciones,
Creen que todos somos iguales;
Tú entraste sin medida a mis emociones,
Que hoy por hoy son descomunales…

Para mí no hay un felices los tres,
Eso ya es inmadurez de las personas;
Yo sé que te gusto aunque no me ves,
Ups, volé demasiado, perdona…

Desde lejos te quiero y aquí espero,
No busco una relación, sólo contigo,
Puedes decir que estoy loco, pero me esmero,
Para que mañana tú estés conmigo…

Si me brindas confianza, la cuidaré,
Regálame tu corazón, no fallaré;
Desde lejos respetaré el noviazgo,
Porque yo pienso que es un gran hallazgo…

Vayas donde vayas, yo quiero ir,
No me gustaría verte más sufrir;
Ganarme a tus papás, ganar tu amor,
Dime que sí, es un pequeño favor…

Desde lejos pienso en cómo estás,
Me preocupo mucho y no somos nada;
Cuando llegas no deseo saber que te vas,
Permíteme ver tu linda mirada…

Podríamos intentarlo si quieres,
Esperarnos también si así prefieres;
Lo que digas, con gusto lo haré,
Desde lejos yo no me alejaré…

Tal vez te guste mi forma de ser,
Estoy sin ti y no busco que hacer;
Desde lejos voy a ser tan fiel,
Deja que acaricie tu suave piel…

Tú estás allá y yo permanezco aquí,
Trato de fingir siendo muy feliz;
Si somos novios, te visitaría siempre,
Y desde lejos haré que mi voz te encuentre…
Nada me dejaría más contento que un sí,
No te puedo olvidar después que te vi;
Desde lejos esperaré una buena respuesta,
Mi corazón por el tuyo ya apuesta…

Quisiera eso y darte muchos detalles,
Acompañarte por la luz de la calle;
Desde lejos aguantaré este beso,
Donde te aseguro llevarte al universo…

Te brindaré confianza piénsalo bien,
Te regalaré amor y cariño también;
Soy un hombre maduro, parejo,
Y yo te seré fiel, desde lejos…

Para ti esta rosa (Jesica hayes 12 años)


Para ti esta rosa.
Aunque no es la más preciosa
te la doy con mucho amor
para que me quieras sin temor.

La rosa
una bella flor
es mi corazón.
Delicada,
perfumada
con un bello color.
Me calienta el alma
con un fuego acogedor.

Tú, mamá,
siempre estarás,
y tendrás,
mi corazón

yo soy esa rosa
que necesita tus cuidados
y bello cariño

¡NO! al maltrato infantil(jacob neruda)


¡NO! al Maltrato infantil.

Hace poco que naciste,
¡todavía no sabes hablar!
apenas puedes caminar,
pero ya sabes de dolor y hambre
y el llanto es tu verdad.

Pequeño ser desvalído,
tu cuerpecito lastimaron:
la crueldad y la ira,
de quienes debían protegerte
y amarte en ésta vida.

Llora más fuerte niño triste,
que tu piel herida reclame:
los besos y caricias que te deben,
Desde cuando naciste.

Llora más fuerte niño triste,
que tu llanto, atraviese los muros de tu pena...
y suba al cielo,
que Dios bajará a darte consuelo.